Cuando vas al doctor, esperas que te ayude a mejorar, y la mayoría de las veces, eso es lo que pasa. Sin embargo, ¿qué pasa si tu condición empeora y estás pensando en presentar una demanda por negligencia médica? ¿Podrían usar en tu contra el hecho de que no seguiste las indicaciones del doctor?
La respuesta es: puede ser.
No seguir las indicaciones del doctor puede afectar tu caso, pero eso no significa que automáticamente pierdas tus derechos legales. Si quieres saber más sobre tus opciones legales*, puedes contactar a Morgan & Morgan para una evaluación gratuita de tu caso.
Lo que debes saber sobre tu derecho a demandar
Primero, hablemos de lo básico.
Como paciente, tienes derecho a esperar cierto nivel de cuidado por parte de tus proveedores médicos. Cuando no se cumple ese estándar, ya sea por un mal diagnóstico, un error durante una cirugía, un problema con la medicina que te dieron, u otra forma de negligencia, puede que tengas motivos para presentar un reclamo por negligencia médica.
Pero como en cualquier reclamo legal, tu caso depende de la evidencia, de lo que causó tus lesiones, y de la credibilidad de lo que se presenta.
Y aquí es donde las cosas pueden complicarse si no seguiste las indicaciones del doctor. Lo que hiciste (o no hiciste) puede usarse para decir que tus lesiones fueron en parte tu culpa.
¿Qué significa no seguir las indicaciones del doctor?
No seguir las instrucciones médicas, también conocido como falta de cumplimiento o falta de adherencia, puede incluir cosas como:
- • No tomar la medicina recetada
- • Saltarte las citas de seguimiento
- • Ignorar las instrucciones de cuidado después de una cirugía
- • No hacer los cambios de estilo de vida recomendados (como dejar de fumar o cambiar la dieta)
- • Negarte a hacerte pruebas adicionales o recibir más tratamiento
A veces, no seguir las indicaciones tiene razones entendibles, como no tener transporte, miedo a los efectos secundarios o el costo de los medicamentos. Pero, legalmente hablando, la corte puede considerar cómo tus decisiones influyeron en tus lesiones.
Cómo ve el sistema legal la falta de cumplimiento del paciente
Negligencia comparativa
La mayoría de los estados siguen un principio legal llamado “negligencia comparativa,” que permite que la culpa se divida entre el demandante (tú) y el demandado (el doctor, hospital, etc.).
Si no seguiste las órdenes del doctor y eso contribuyó a tu lesión, la corte podría reducir tu compensación según el porcentaje de culpa que te asignen.
Por ejemplo, si tu doctor te recetó antibióticos después de una cirugía y no los tomaste, y luego desarrollaste una infección y presentaste un Reclamo por negligencia, la corte podría decir que tú tuviste un 30% de la culpa por no tomar el medicamento. Entonces, tu compensación se reduciría en un 30%.
En algunos estados, aún puedes recibir dinero incluso si tuviste la mayor parte de la culpa. Pero en otros, si te consideran responsable en más del 50% o 51%, podrías no recibir nada.
Negligencia contributiva (menos común)
Unos pocos estados (como Alabama, Maryland, Carolina del Norte, Virginia y Washington, D.C.) siguen una regla más estricta llamada negligencia contributiva. Según esta regla, si tú tuviste, aunque sea un 1% de culpa, podrías perder por completo tu derecho a demandar.
Así que, si no seguiste las instrucciones del doctor y esa decisión tuvo, aunque sea un pequeño impacto en tu lesión, tu caso podría ser rechazado.
Cuando no seguir las órdenes no afecta tu caso
Es importante saber que no siempre arruinas una demanda por no seguir las indicaciones médicas. Hay muchas situaciones en las que un paciente ignora o modifica los consejos del doctor y aun así tiene un Reclamo sólido.
El daño original ya estaba hecho
Si tu doctor cometió un error grave antes de que tú tuvieras la oportunidad de seguir (o no seguir) las instrucciones, lo que hiciste después podría no importar.
Por ejemplo, imagina que te dieron la dosis equivocada de un medicamento y eso te causó daño en los riñones. Aunque después no hayas ido a una cita de seguimiento, el daño ya estaba hecho.
Las instrucciones eran confusas o inapropiadas
A veces, los pacientes no siguen las indicaciones porque las instrucciones eran confusas, se contradecían o incluso no tenían sentido desde el punto de vista médico.
Imagina que un cirujano le dice a un paciente que puede volver a sus actividades normales “lo antes posible,” pero el paciente entiende eso como hacer ejercicio intenso, y eso le causa complicaciones. Si las instrucciones no eran claras o específicas, la responsabilidad podría caer en el proveedor.
El paciente tenía razones válidas para no seguir las indicaciones
Las cortes y los jurados muchas veces están dispuestos a considerar razones legítimas para no seguir las órdenes médicas:
- • No podías pagar el medicamento
- • Nunca te explicaron bien la importancia de la cita de seguimiento
- • El doctor no te dejó claro que era urgente
- • Hubo barreras culturales o de idioma que afectaron la comunicación
Si tu decisión fue razonable o no pudiste evitarla, ese contexto puede ser clave para tu defensa.
Negligencia médica vs. lesiones personales
Este tema no se aplica solo a los casos de negligencia médica. Por ejemplo, imagina que tuviste un accidente de carro, recibiste atención médica y luego no seguiste el plan de recuperación que te dio el doctor. La aseguradora del otro conductor podría decir que tú empeoraste tus lesiones al no seguir las indicaciones médicas, y por eso no deberían pagarte tanto.
Incluso en Reclamos de compensación laboral, los empleadores y las compañías de seguros pueden señalar que no seguiste las recomendaciones para cuestionar qué tan graves fueron tus lesiones o cómo sucedieron.
En otras palabras, lo que hagas después de una lesión importa en todo tipo de casos de lesiones personales, no solo en los que involucran errores médicos.
Cómo usan las aseguradoras el incumplimiento en tu contra
Cuando presentas un Reclamo, las aseguradoras suelen buscar cualquier excusa para negarlo o reducir lo que tienen que pagarte. Si encuentran pruebas de que no tomaste tus medicinas, faltaste a terapia, o ignoraste resultados de exámenes, podrían decir que:
- • Empeoraste tu condición
- • Tus lesiones no eran tan graves como dices
- • No hiciste tu parte para reducir los daños
Esta táctica es muy común en Reclamos de alto valor. Por eso es tan importante contar con un abogado con experiencia que sepa cómo defender tu caso y mostrar el panorama completo.
Cómo defender tu caso, aunque no hayas seguido las indicaciones
Si te preocupa que no haber seguido las instrucciones del doctor pueda afectar tu caso, aquí tienes algunas formas en las que tú (y tu abogado) pueden fortalecer tu Reclamo:
1. Documenta todo
Guarda registros de:
- • Lo que te dijo el doctor
- • Qué medicamentos o tratamientos te recetaron
- • Por qué no los seguiste (costo, efectos secundarios, malentendido)
- • Cualquier conversación con el doctor sobre cambiar o suspender el tratamiento
2. Explica tus razones
Tu abogado puede ayudar a explicar ante la corte por qué tu decisión fue razonable o por qué no tuvo un impacto real en el resultado de tu salud.
3. Resalta los errores del proveedor
Si el proveedor de salud cometió un error grave antes de que tú te salieras del plan, enfoca el caso en esa falla principal.
4. Usa el testimonio de profesionales médicos
Un profesional médico puede ayudar a demostrar que:
- • El cuidado original del doctor fue negligente
- • Lo que hiciste tú no fue la causa principal de tu lesión
- • Cualquier persona razonable en tu situación podría haber hecho lo mismo
Estas estrategias pueden ayudar a que tu Reclamo siga siendo válido, incluso si hubo momentos en los que no seguiste el plan médico al pie de la letra.
¿Y si me engañaron o no me informaron bien?
Los doctores tienen la obligación legal de obtener tu consentimiento informado antes de cualquier tratamiento. Eso incluye explicarte:
- • En qué consiste el tratamiento
- • Qué riesgos tiene
- • Qué podría pasar si no sigues el plan
Si tu proveedor no te explicó bien estas cosas o no te dio tiempo para hacer preguntas, esa falta de información puede reducir tu responsabilidad por no haber seguido las indicaciones después.
Qué hacer si no estás seguro sobre tu caso
Si crees que un error médico te causó daño, pero te preocupa que tus propias acciones puedan afectar tu caso, no asumas que ya no tienes opciones.
Mejor habla con un abogado de negligencia médica en Morgan & Morgan. Durante la consulta inicial, cuéntales con honestidad todo lo que pasó y deja que te ayuden a evaluar qué tan fuerte podría ser tu Reclamo.
En Morgan & Morgan, hemos ayudado a miles de personas a ganar sus casos, incluso cuando los hechos no eran perfectos. Sabemos cómo manejar situaciones complicadas, incluyendo cuando las decisiones del paciente forman parte de la historia.
Sí, no seguir las órdenes del doctor puede afectar tu posibilidad de demandar, pero eso no significa que pierdas tus derechos. Las preguntas clave son:
- • ¿Tu falta de cumplimiento fue la causa directa o agravó el daño?
- • ¿Las instrucciones originales eran claras, razonables y necesarias?
- • ¿La negligencia del doctor ocurrió antes o sin importar tus acciones?
Si sufriste por un error médico o no estás seguro de si tienes un Reclamo, no des por hecho que no puedes hacer nada. Nuestros abogados pueden evaluar tu caso gratis, y si decidimos trabajar juntos, solo cobramos si ganamos. No hay riesgo ni compromiso.
Si tú o alguien que quieres ha sufrido por culpa de la negligencia de un proveedor de salud, contáctanos hoy mismo para una evaluación gratuita de tu caso y descubre cómo podemos ayudarte.
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