Cuando ves luces intermitentes y una embarcación de la Guardia Costera acercándose a toda velocidad a un problema, lo último que esperas es que los rescatadores terminen siendo los que causen un accidente trágico. Pero pasa. Desde choques a alta velocidad hasta maniobras descuidadas en puertos llenos, los barcos de la Guardia Costera, como cualquier otro, pueden causar lesiones graves o incluso la muerte si los que los manejan no tienen cuidado*.
Para las víctimas y sus familias, todo esto puede ser muy confuso. ¿Se puede demandar a la Guardia Costera? ¿Qué derechos tienes cuando está involucrada una agencia del gobierno? La verdad es que incluso las operaciones de rescate del gobierno tienen que seguir la ley, y cuando hay negligencia, sí se les puede hacer responsables.
Entendiendo el rol de la Guardia Costera y sus límites
La Guardia Costera de EE.UU. está para proteger nuestras aguas, hacer cumplir las leyes marítimas y ayudar en rescates. En emergencias, su presencia suele ser bienvenida. Pero también manejan embarcaciones súper rápidas y potentes, muchas veces en situaciones difíciles o llenas de gente.
Cuando los tripulantes de la Guardia cometen errores —como ir demasiado rápido, no estar atentos, o calcular mal las distancias—, pueden provocar desastres. En los últimos años ha habido casos documentados de barcos de la Guardia Costera chocando con embarcaciones civiles, dañando muelles, y en los peores casos, golpeando a nadadores o a personas haciendo paddle surf.
Cuando la Guardia Costera tiene la culpa
No todos los accidentes en los que está involucrada la Guardia Costera son por negligencia. Pero si hay decisiones imprudentes, mala capacitación o se saltan los protocolos de seguridad, las víctimas pueden tomar acciones legales. Algunas causas comunes de accidentes incluyen:
- Ir demasiado rápido sin que sea una emergencia
- Entrar en zonas restringidas o muy llenas sin advertencia
- No comunicarse con otras embarcaciones
- Chocar con barcos de recreo más pequeños
- Hacer mal maniobras de búsqueda y rescate
Incluso en misiones oficiales, se espera que actúen con cuidado, sobre todo cuando hay civiles cerca.
¿Se puede demandar a la Guardia Costera?
Demandar a una agencia del gobierno es más complicado que a una persona común, pero sí se puede. Estos reclamos suelen estar cubiertos por la Ley Federal de Reclamaciones por Agravios (FTCA) o la Ley de Ampliación del Almirantazgo, dependiendo del caso.
Estas leyes permiten que puedas pedir una compensación si alguien del gobierno, en su trabajo, te causó daño, siempre que se cumplan ciertos requisitos legales.
Eso sí, hay plazos estrictos, procedimientos especiales y puede haber límites en lo que puedes recuperar. Pero si cuentas con un abogado que conozca bien de lesiones marítimas, todavía puedes buscar justicia y que se hagan responsables.
¿Tienes un caso?
Si tú o alguien que quieres resultó herido en un incidente con un barco de la Guardia Costera, puede que califiques para hacer un reclamo. Tendrías que demostrar que actuaron con negligencia y que eso fue lo que causó directamente tus lesiones o pérdidas.
Esto puede incluir casos donde un barco de la Guardia golpeó tu embarcación, provocó una estela que volcó un bote pequeño, no cedió el paso o hizo una maniobra peligrosa cerca de nadadores. Si el accidente te causó gastos médicos, pérdida de ingresos, daños materiales o trauma emocional, podrías obtener una compensación mediante un reclamo federal.
Cómo puede ayudarte un abogado de Morgan & Morgan
Los casos contra la Guardia Costera y otras agencias federales necesitan a alguien que entienda bien el derecho marítimo y todo el proceso complicado de los reclamos federales. Un abogado con experiencia puede revisar tu caso, ver si lo que hizo la Guardia fue negligente y ayudarte a presentar el reclamo correspondiente.
Si la agencia no acepta la culpa o no quiere pagar lo justo, tu abogado puede llevar el caso a los tribunales federales. Así te aseguras de que tu voz sea escuchada, incluso frente al gobierno.
Por qué estos reclamos importan
Las lesiones en el agua pueden dejar secuelas graves: huesos rotos, daño en la médula, lesiones cerebrales o incluso la muerte. Y si el daño viene de quienes deberían protegerte, el impacto emocional es aún peor.
Presentar un reclamo no solo te ayuda a recuperarte económicamente, también manda un mensaje claro a la Guardia Costera y otras agencias: la seguridad debe ser prioridad. Las víctimas merecen justicia y las familias merecen respuestas.
Estamos de tu lado
Si un barco de la Guardia Costera causó tu lesión o la pérdida de alguien que amas, en Morgan & Morgan podríamos ayudarte. Nuestro equipo legal tiene la experiencia, los recursos y las ganas para enfrentarse a agencias del gobierno y luchar por lo que te corresponde.
Hablá con nosotros hoy mismo para una evaluación gratuita y sin compromiso de tu caso.